¿QUÉ ES REALMENTE EL BRANDED CONTENT?

Branded Content: en qué consiste el ámbito en el que trabajamos:

En Pop Up nos van las cosas sencillas.

Creemos que a menudo tendemos a complicarlas por falta de lucidez para hacerlas más simples. Nos gusta una cita que se atribuye a Winston Churchill: “perdone por haberle escrito una carta tan larga, no he tenido tiempo de resumirla”.

Un ejemplo de lo mucho que nos gusta dar la vuelta a los conceptos: teclea “definición Branded Content” en google y recibirás de vuelta la friolera de 18.700 resultados. Cuando en realidad la cosa no da para tanto…
Branded Content = Branded + Content

Branded Content es simplemente un contenido que cumple estas dos condiciones (¡ojo, ambas!):

• Content: traducido como contenido, alude a cualquier obra o pieza destinada a aportar un valor a su audiencia. Este valor sólo puede ser de dos tipos, bien informativo (como la Aplicación Madrid Mola) o bien de entretenimiento (como cualquiera de nuestras webseries o series de TV). Si no aporta ni lo uno ni lo otro, entonces no es un contenido.

• Branded: la segunda condición es que ha de estar co-producido por una marca para respirar inequívocamente su ADN y comunicar sus atributos y valores. Introducir una marca en un contenido que ya existe puede ser un patrocinio (como el clásico ejemplo de FIB Heineken o el más reciente del Sonar con Damm) o un product placement (aquí tienes un célebre ejemplo de Sting con Jaguar) pero jamás es Branded Content. Nuestra gira Desconciertos para Verti Seguros sí es un Branded Content, porque su briefing y concepción parte de las necesidades de comunicación de la marca.
Zapatero a tus zapatos

El Branded Content va adquiriendo un creciente protagonismo, debido a:

• la hipersaturación publicitaria,

• la fragmentación de las audiencias y

• el hastío respecto a los impactos publicitarios no solicitados.

Cada vez es más difícil comunicar eficazmente mensajes de marca desde el altavoz de los medios pagados. Por eso cada vez más anunciantes demandan cauces de comunicación más amables con sus audiencias.

Inevitablemente, algo se pone de moda, y como magnetizados por la promesa de negocio, se acercan al sector cientos de empresas de todos los órdenes. Algunos, como las agencias de publicidad y las productoras, imprescindibles en la nueva cadena de valor de los contenidos de marca. Muchos otros, simplemente buscan una etiqueta “de moda” para colocar en sus webs.

No nos cansaremos de decir que, en los proyectos que mejor han funcionado en Pop Up (de todo ha habido, por supuesto), nuestro trabajo siempre ha conseguido equilibrar:

• La parte estratégica: entender bien la marca, estudiar al target y ofrecer a nuestros clientes el mejor servicio disponible. No escatimamos en esto. Cualquiera que nos conozca sabe que sentimos las marcas para las que trabajamos como si fuesen nuestras.

• La parte de producción del contenido: un videoclip lo debe producir alguien habituado a este tipo de trabajo, no a rodar spots. Un guión lo debe escribir un guionista, no un copy, etc. Lo que buscamos es ganarnos a una audiencia con un contenido magnífico, no producir eslóganes felices para ganar premios en festivales.

• La parte de distribución del contenido: a menudo olvidamos que un programa, o una App, o una experiencia bien producida puede no llegar nunca a manos del suficiente público por no saber promocionarla. Ahí es donde entra en juego nuestro trabajo con influencers, con los medios tradicionales y con los social media.

Ese es nuestro trabajo. Y nuestro reto es conseguir ofrecerlo con los mejores recursos posibles.

Que es lo mismo que decir con los mejores profesionales.